sábado, 31 de marzo de 2012

Descansar

Lo pensé recién, fue como un instante, un momento. Pasa algo, quedándose quieto. Todo está moviéndose, siempre está moviéndose todo. Es que es tan relativo. Pensar que nos movemos a la misma velocidad que todo y por eso es que no percibimos el cambio de velocidad, y entonces hace falta simplemente "trasladarse", es decir, "quedarse quieto" en otro lugar para quedarse quieto en otro diferente. Recién entonces veremos como las cosas se mueven, por contra-ejemplo a nuestra quietud. El umbral que separa la visión perfecta de la común es simplemente el cerebro. Si nos quedamos quietos (esto es lo que comúnmente llamamos "movernos" pero lo común no es verdad) vemos como en realidad lo que se mueve es todo lo otro mientras nosotros permanecemos. Todo cambia, nosotros permanecemos. Como se mueve entonces la calle y nosotros tan quietos y ese tacho de basura se mueve y nosotros tan quietos que da miedo y uno muchas veces llora y entonces ve a las gotas de sus ojos permanecer quietas y da miedo. Entonces vemos como todo lo que se movía y no veíamos moverse porque nosotros participábamos de ese movimiento, cambia debido a que nosotros frenamos, y frenar da miedo, no es seguir adelante ni mirar atrás y da miedo, el futuro y pasado, el presente-miedo. No avanzar, estancarse, ver el movimiento como es, cruzar el umbral hacia la vista perfecta... Frenamos y lo demás sigue moviéndose  y todo se mueve aunque no parezca y vos también te estás moviendo y tus ojos se mueven y leen esto y chau, que descansen, que frenen... punto final

No hay comentarios:

Publicar un comentario